lunes, 16 de mayo de 2011

Contando cuentos

 El viernes pasado tuvimos un encuentro los de Infantil con los de Secundaria y les leímos cuentos.



Aquí tenéis algunos recuerdos:

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Escribo mi comentario en esta entrada porque la precedente, me parece demasiado señorial como para poder empañarla por alguna palabra maldicha.
Los tiempos cambian, sí, cambia la imagen, el pensamiento, las necesidades, y como siempre he pensado el ser solo se completa con la muerte, y ni eso sabemos con certeza. Lo que quiero decir con todo este sin sentido, es que llevo en este colegio casi toda mi vida física, y mi vida entera de recuerdos. Lo que me da la certeza para poder decir que el cambio es evidente, antes tenía el colegio como un conjunto de personas, llenas de valores que como es obvio en casa no se podrían adquirir, llegaba a ser un ambiente familiar, supongo que pasa igual en otros centros. Hasta quien sabe si porque me dejaba de hacer pequeño y desarrollaba otra forma de ver el mundo menos novedosa, llegó un cambio muy transcendente en la visión del colegio, creo que la permisibilidad fue cero, al precio de perder esa esencia que les hacía únicos. Intentaban reestructurar el colegio, dando la imagen exacta que querían dar y derruiendo el ambiente familiar que solo era perceptible dentro.Obviamente un colegio es un colegio, pero sacrificaron todo lo anterormente dicho, por ser un colegio más dentro y fuera.
Cambiaron los patios, ahi se intuía un aire de cambio, "donmi" se jubilaba, el tore dio por acabada su vida laboral, y el colegio tuvo que renovabarse por edad.
Los triples en el recreo ya no entraban, y , el aula era fría hasta en verano. Lesmes dejaba sus fórmulas y Don emilio la estructura más estricta para aprender matemáticas. No sé, si me han enseñado algo las horas de clase, pero desde luego que aquel ambiente me enseñado a amar álgo más en la vida, aparte de mi madre y mi padre.
Aunque haya aborrecido al colegio, creo que un día me llego a dar paz.
Paz que he de salir a buscar fuera, cosa que nunca imagine y menos en una fecha tan prematura.

Desde crío esperando el timbre del recreo, el patio de mayores un sitio inhabitado, coronado por escaleras verdes, y, un paredón grisaceo resquebrajad, decorado por el color de gandhi(guardba un gran parecido con "Donmi"), encima los corredores al mando de Luismi, el desierto, y arriba el cielo, la cuesta por la que tirarte, las escaleras con huecos ocultos, las canchas, y los "Piques" del fútbol, cruzar la llanura prohibida que daba paso a los bocatas "del Tore", correr por aquella llanura, no poder parar, llegar a mi sitio, con la cara llena de chocolate, el bollycao,los tazos y las peonzas(Hoy prohibidas en el colegio),pasar cromo tras cromo con un "no le, si le...",callar insultos, buscar el gol aunque los codos se quedasen en el intento, marcar y volver triunfador tras el timbre, subir y contar vivencias nuevas con cada paso de escalera, bajar a comer, tirar la comida por hora y media más de libertad, comerme el pan,hacer la fila y figurar el horario en torno
a creer en la salvación de mi madre con la merienda en mano, creer en el verano merecido,y, en volver con más ganas en septiembre...

Realmente no se que será del colegio, por eso escribo lo que fue una vez, podría escribir aún más pero sería excesivo para un comentario.
No se donde andaré el año que viene pero Gracias.
Savento

Profesores de Lengua del colegio San Viator de Madrid dijo...

Todo te irá muy bien y guarda para siempre los buenos recuerdos,olvida los malos. Aquí te esperamos, imperfectos, pero con cariño e ilusión por verte feliz.